Cómo Diferenciar el Trastorno de Ansiedad por Separación en Niños
Imagínate que tu pequeño de repente no quiere ir a la escuela, llora cada vez que tienes que salir y parece que siempre está preocupado de que no volverás. Aunque todos los niños pueden sentirse ansiosos cuando se separan de sus padres, a veces esa ansiedad puede ser un signo de algo más serio llamado trastorno de ansiedad por separación. ¿Cómo saber si es algo normal o si es un trastorno? Aquí te lo explico de manera sencilla.
Ansiedad por Separación Normal
La ansiedad por separación es una parte normal del desarrollo de un niño. Por ejemplo, los bebés pueden llorar cuando sus padres salen de la habitación, pero esto generalmente mejora con el tiempo. Entre las edades de 6 meses a 3 años, es típico que los niños se sientan inquietos cuando se separan de sus padres, especialmente en situaciones nuevas.
Señales de Ansiedad por Separación Normal:
- Llanto al despedirse, pero se calma después de unos minutos.
- Prefiere estar con sus padres, pero aún puede jugar y explorar por su cuenta.
- Muestra confianza cuando los padres regresan.
- La ansiedad no interfiere con su vida diaria.
Trastorno de Ansiedad por Separación
El trastorno de ansiedad por separación es más intenso y duradero. No se trata solo de sentir un poco de tristeza al despedirse; es un miedo abrumador y persistente que puede afectar la vida diaria del niño.
Señales del Trastorno de Ansiedad por Separación:
- Ansiedad extrema al separarse de los padres que dura más de cuatro semanas.
- Miedo constante de que algo malo les sucederá a ellos o a sus padres.
- Problemas físicos como dolores de cabeza o de estómago cuando anticipan una separación.
- Evita situaciones que requieren separación, como ir a la escuela o dormir en casa de un amigo.
- La ansiedad interfiere con sus actividades cotidianas y con su capacidad para disfrutar de la vida.
Cómo Ayudar a tu Hijo
Si notas que tu hijo muestra señales de trastorno de ansiedad por separación, es importante hablar con un profesional de la salud mental. Ellos pueden ofrecer estrategias y apoyo para ayudar a tu hijo a manejar su ansiedad. Mientras tanto, puedes:
- Mantener una rutina constante para darles seguridad.
- Practicar separaciones breves y graduales.
- Reforzarles que siempre regresarás y que estarán seguros.
Recuerda, sentir un poco de ansiedad es normal, pero cuando se vuelve abrumador, hay ayuda disponible. Con apoyo y comprensión, tu hijo puede aprender a manejar sus miedos y sentirse seguro, incluso cuando no estás cerca.